“. . .gastos para la enseñanza, justicia, defensa, obras públicas de carreteras, necesidades culturales, socorro contra la crisis, etcétera, no pueden justificarse por la posibilidad de dar una ganancia al Estado o Municipio. En cambio, se justifican directamente por las consecuencias sociales y económicas que se espera se originen. . .Si el Estado hace un ferrocarril o si el Municipio mantiene una fábrica de gas o de electricidad, un matadero o una línea de tranvías, no es para desarrollar un negocio productivo o para hacer una buena inversión, sino para mantener una industria que de otro modo, no existiría, o por consideración hacia los intereses de los consumidores y productores del Municipio. . ."
G. Myrdal
No hay comentarios:
Publicar un comentario